El registro de una empresa comienza con la elección de la estructura jurídica, que puede ser: persona natural, sociedad limitada (S.L.), sociedad por acciones simplificada (S.A.S.), entre otras. Una vez definida la estructura, debes:

• Inscribir la empresa en la Cámara de Comercio de la ciudad correspondiente, obteniendo el Registro Mercantil.
• Obtener el NIT (Número de Identificación Tributaria) en la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), lo que te permitirá cumplir con las obligaciones fiscales.
• Si tu actividad está sujeta a licencias específicas, deberás obtenerlas en las autoridades locales correspondientes (por ejemplo, alcaldías, secretarías de salud).

Es recomendable que un abogado revise todos los documentos legales, como los estatutos y contratos, para asegurarse de que cumples con todas las normativas.

En Colombia, existen varios tipos de contratos según la modalidad del empleo:

• Contrato a término fijo:Tiene una duración determinada y debe especificar la fecha de inicio y finalización.
• Contrato a término indefinido:No tiene una fecha de finalización.
• Contrato de obra o labor:Se firma por la duración de una obra específica.
• Contrato temporal:Es para situaciones transitorias y se usa en ciertos sectores específicos.

El contrato debe incluir, al menos, información sobre salario, horario de trabajo, funciones y beneficios laborales. Además, es importante registrar al empleado en un fondo de pensiones, salud y riesgos laborales para cumplir con el deber de seguridad social.

En Colombia, las opciones más comunes para emprendedores son las siguientes:

• Persona natural (autónomo):Si eres un individuo que trabaja por cuenta propia y no quieres complicarte con trámites, puedes operar como persona natural, pero asumes responsabilidad ilimitada frente a las deudas.
• Sociedad por Acciones Simplificada (S.A.S.):Es la opción más popular para los emprendedores en Colombia. Permite tener una estructura flexible y responsabilidad limitada (sólo se responde con el patrimonio de la empresa). Es ideal tanto para pequeñas como para grandes empresas y no requiere capital mínimo.
• Sociedad Limitada (S.L.):Ideal si no deseas que otros tengan participación en la empresa. La responsabilidad de los socios está limitada al monto de su aporte.
• Sociedad Anónima (S.A.):Se utiliza principalmente en grandes empresas que buscan obtener capital a través de la emisión de acciones.

Si un cliente no paga, debes seguir estos pasos:

• Intentar la negociación o mediación:Lo primero es tratar de resolver la situación de manera amistosa, enviando cartas de cobro o acordando un plan de pago.
• Proceso de cobro judicial:Si la negociación no funciona, puedes iniciar un proceso de cobro en el Juzgado Civil de Circuito. La ley colombiana establece mecanismos para la cobranza de deudas, como la acción ejecutiva.
• Proceso monitorio:Si el valor adeudado no es muy alto y el deudor tiene el dinero suficiente, puedes solicitar este proceso a través de la Superintendencia de Sociedades o ante los juzgados.

Un contrato de compraventa debe ser claro e incluir:

• Descripción de las partes:Nombre completo, cédula de ciudadanía y dirección.
• Objeto del contrato:Descripción detallada del bien o servicio que se está vendiendo.
• Precio y forma de pago:Especificar el precio, la moneda y las condiciones de pago (si es a plazos, anticipos, etc.).
• Garantías y responsabilidad:Asegurar que quede claro si hay garantías sobre el producto y las condiciones de devolución o cambio.

Aunque no es obligatorio hacerlo por escrito para ciertos bienes de bajo valor, siempre es recomendable redactarlo para evitar posibles disputas legales.

Si tu empresa sufre un robo o fraude, debes realizar lo siguiente:

• Reunir pruebas:Documenta todos los detalles y pruebas del robo o fraude (por ejemplo, registros contables, cámaras de seguridad, testigos).
• Notificar a las autoridades:Si el fraude es grave, como el robo de grandes sumas de dinero, puedes presentar una denuncia ante la Fiscalía General de la Nación.
• Acción disciplinaria interna:Dependiendo de la gravedad, puedes iniciar un proceso disciplinario interno y despedir al empleado por justa causa.
• Recuperación de bienes:Si es posible, puedes tratar de recuperar los bienes robados por medio de un proceso judicial.

Sí, los extranjeros pueden abrir empresas en Colombia. Los requisitos son:

• Registro en la Cámara de Comercio:Los extranjeros deben registrarse como persona natural o como persona jurídica (si crean una empresa).
• NIT (Número de Identificación Tributaria):Deben obtenerlo en la DIAN para cumplir con las obligaciones fiscales.
• Nombrar un representante legal:Si no resides en Colombia, necesitas nombrar a un representante legal que sea residente en el país.
• Cumplir con la normativa:Debes cumplir con las regulaciones locales en materia laboral, tributaria y comercial.

Los empresarios tienen diversas responsabilidades frente a los consumidores. Si un producto es defectuoso y causa daño, la empresa debe:

• Tomar medidas inmediatas:Si se identifica un defecto en el producto, es obligatorio tomar acciones para mitigar el riesgo.
• Notificar a la autoridad competente:Es importante informar a la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) sobre el problema para evitar sanciones legales.
• Ofrecer compensaciones:Dependiendo del daño causado, la empresa puede verse obligada a reparar el producto, reemplazarlo o compensar al cliente.

El incumplimiento de estas responsabilidades puede derivar en sanciones económicas y demandas legales.

Para reducir el riesgo de demandas legales, es recomendable:

• Redactar contratos claros y bien estructuradoscon proveedores, empleados y clientes.
• Cumplir con las obligaciones fiscales y laboralespara evitar sanciones o litigios.
• Contratar seguros que cubran daños a terceros, accidentes laborales o reclamaciones de consumidores.

El incumplimiento de las obligaciones laborales en Colombia puede tener graves consecuencias, como:

• Sanciones económicas:Impuestas por el Ministerio de Trabajo o la Caja de Compensación Familiar.
• Demandas laborales:Los empleados pueden acudir a la Justicia Laboral para exigir pagos atrasados o indemnizaciones.
• Litigios largos y costosos:Un proceso legal puede afectar la estabilidad financiera y la reputación de la empresa.

Para evitar problemas, es fundamental llevar un control riguroso de las obligaciones laborales y contar con asesoría legal.

El derecho de petición es un mecanismo consagrado en el artículo 23 de la Constitución Política de Colombia y desarrollado por la Ley 1755 de 2015. Permite a cualquier persona, natural o jurídica, solicitar información, documentos o decisiones a entidades públicas o privadas que presten servicios públicos o ejerzan funciones públicas. Este derecho es una herramienta clave para garantizar la transparencia, el acceso a la información y la participación ciudadana.

El artículo 23 de la Constitución Política de Colombia establece que cualquier persona, sin importar su nacionalidad, puede presentar un derecho de petición en Colombia. Esto incluye tanto a ciudadanos colombianos como a extranjeros, siempre que la solicitud se realice ante una entidad pública o privada que preste servicios públicos o realice funciones administrativas. No es necesario ser abogado para ejercer este derecho, y las solicitudes pueden presentarse por cualquier medio: escrito, electrónico o incluso de manera verbal.

En Colombia, el derecho de petición puede presentarse en diversas modalidades según la naturaleza de la solicitud. El artículo 14 de la Ley 1437 de 2011 establece diferentes plazos y tipos de peticiones, entre ellos:

• Peticiones de documentos e información: Incluyen solicitudes para obtener documentos o información de entidades públicas o privadas que presten servicios públicos o ejerzan funciones públicas. Estas peticiones deben resolverse en un plazo de diez (10) días a partir de su recepción. Si la respuesta no se da dentro de este plazo, se entenderá que la solicitud ha sido aceptada de manera tácita, y la entidad no podrá negar la entrega de los documentos. En este caso, las copias deben entregarse dentro de los tres (3) días siguientes.
• Consultas a las autoridades: Se refiere a solicitudes en las que el peticionario busca una interpretación o pronunciamiento sobre temas legales o administrativos de competencia de la entidad. Estas peticiones deben resolverse dentro de un plazo de treinta (30) días a partir de su recepción.
• Otras peticiones:Existen otros tipos de peticiones que no están reguladas con plazos especiales, pero deben resolverse en un plazo general de quince (15) días desde su recepción.

De acuerdo con el artículo 14 de la Ley 1437 de 2011, el término general para resolver un derecho de petición es de quince (15) días contados a partir de la recepción de la solicitud. No obstante, existen excepciones:

• Peticiones de documentos e información:deben resolverse en un plazo máximo de diez (10) días.
• Consultas a las autoridades:el plazo para dar respuesta es de treinta (30) días.
• Excepciones y prórrogas:Si la entidad no puede resolver la petición dentro del plazo establecido, debe informar al peticionario antes del vencimiento del término, explicando los motivos de la demora y estableciendo un nuevo plazo, que no podrá exceder el doble del tiempo inicialmente previsto.

Si una entidad pública o un particular no responden un derecho de petición dentro de los plazos legales y no informan las razones del retraso, el peticionario puede interponer una acción de tutela ante un Juez de la República. Esta acción busca garantizar que la entidad cumpla con su obligación de responder y respete el derecho fundamental de petición.

La acción de tutela es un mecanismo legal en Colombia, consagrado en el artículo 86 de la Constitución Política. Permite a cualquier persona solicitar ante un juez la protección inmediata de sus derechos fundamentales cuando estos estén siendo vulnerados o amenazados por una acción u omisión de una autoridad o, en algunos casos, de un particular.

Características de la tutela:

• Procedimiento rápido y expedito.
• No requiere abogado.
• Protege derechos fundamentales.

Cualquier persona, sin importar su nacionalidad, puede interponer una acción de tutela en Colombia. No es necesario ser abogado, y puede presentarse directamente por el afectado o por un representante en caso de incapacidad.

Para presentar una tutela, se debe redactar un escrito dirigido a un juez competente que contenga:

• Identificación del solicitante y, si aplica, de su representante.
• Descripción de los hechos que fundamentan la solicitud, explicando cómo se vulneran los derechos fundamentales.
• Identificación de la entidad o persona responsable.
• Petición de protección y las medidas necesarias para garantizar el derecho.

Puede presentarse por escrito o verbalmente, en cuyo caso el juez se encargará de redactar el documento.

El artículo 29 del Decreto 2591 de 1991 establece que el juez debe resolver una acción de tutela en un plazo máximo de diez (10) días hábiles contados desde la recepción de la solicitud.

La conciliación extrajudicial en derecho es un mecanismo alternativo de solución de conflictos en el que las partes, con la intervención de un conciliador autorizado, buscan solucionar voluntaria y directamente sus diferencias sin necesidad de acudir a un proceso judicial.

En Colombia, esta figura es un requisito de procedibilidad en ciertos casos civiles, familiares o administrativos, y está regulada por la Ley 2220 de 2022.

Efectos jurídicos de la conciliación:

Los acuerdos alcanzados en una conciliación tienen carácter vinculante, lo que significa que:

• El acta de conciliación tiene efecto de cosa juzgada.
• En caso de incumplimiento, la parte afectada puede exigir su cumplimiento ante un juez mediante un proceso ejecutivo.

La cláusula penal es una disposición contractual mediante la cual se establece, de manera anticipada, la sanción que deberá aplicarse en caso de incumplimiento de las obligaciones pactadas. De este modo, se entiende que es una obligación accesoria al contrato, cuya aplicación depende del incumplimiento de la obligación principal.

El propósito de esta cláusula es garantizar el cumplimiento de lo acordado, ya que, al prever una sanción, se incentiva a las partes a cumplir con sus compromisos y se minimizan los riesgos de incumplimiento.

Existen dos tipos de cláusulas penales, clasificadas según la naturaleza del incumplimiento:

• Cláusula penal compensatoria:corresponde a la sanción por los daños causados debido al incumplimiento total o parcial de la obligación principal.
• Cláusula penal moratoria:aplica cuando el incumplimiento se produce por un retraso en el cumplimiento de la obligación principal.

En ambos casos, esta herramienta contractual aporta claridad y seguridad para las partes.

En los contratos es fundamental distinguir entre los diferentes tipos de obligaciones:

• Obligaciones principales:son aquellas que tienen su propio propósito y existen de manera independiente. Su validez y ejecución no dependen de ninguna otra obligación.
• Obligaciones accesorias:dependen de la obligación principal para existir o producir efectos. Carecen de autonomía, ya que su razón de ser depende de la obligación principal.

La consecuencia principal de esta diferenciación radica en la frase: "lo accesorio sigue la suerte de lo principal". Esto significa que, si la obligación principal produce determinados efectos, la obligación accesoria también lo hará (un ejemplo es la nulidad: si la obligación principal es nula, la accesoria también lo será).

Sin embargo, este principio no opera en sentido inverso: la nulidad o extinción de una obligación accesoria no afecta la validez de la obligación principal.

Esta relación entre lo principal y lo accesorio resulta clave para entender la estructura y el funcionamiento de las obligaciones dentro de un contrato.

Para elaborar un contrato, en primer lugar, es necesario identificar el tipo de contrato que se desea realizar. Para ello, es fundamental delimitar la obligación principal y el objeto del contrato, ya que de estos elementos se deriva su naturaleza jurídica (compraventa, arrendamiento, comodato, suministro, entre otros).

Una vez identificado el tipo de contrato, se deben determinar correctamente las partes involucradas y las obligaciones principales que surgen del objeto del contrato. Esto implica establecer a qué se compromete cada parte, lo cual varía dependiendo de la naturaleza del acuerdo.

A continuación, se debe especificar la duración del contrato, es decir, el período durante el cual las partes estarán obligadas a cumplir con lo pactado. Después, se pueden incluir otras cláusulas según lo acordado por las partes, adaptándose a las particularidades de la relación contractual.

Finalmente, el contrato debe concluir con la firma de las partes, que constituye una manifestación inequívoca de su voluntad de comprometerse a los términos establecidos en el documento. La firma es un elemento esencial que otorga validez y formalidad al contrato.

La posibilidad de modificar un contrato después de su firma es una cuestión frecuente en el ámbito jurídico. Para ello, existe la figura del otrosí, un mecanismo legal que permite añadir nuevas cláusulas o modificar las ya existentes en un contrato.

Es fundamental que el otrosí evidencie de manera clara los cambios o adiciones realizados al contrato, especificando exactamente qué aspectos se modifican y cuáles permanecen inalterados. Además, es clave que las partes estén plenamente de acuerdo con su contenido, ya que su validez depende del consentimiento mutuo.

Esta herramienta permite adaptar el contrato a nuevas circunstancias, asegurando que se mantenga vigente y adecuado a las necesidades de las partes sin afectar la integridad del resto de sus disposiciones.

Los contratos, por lo general, tienen una duración previamente establecida. Sin embargo, cuando un contrato se pacta con término indefinido o se desconoce su duración, su terminación puede darse conforme a lo estipulado en sus cláusulas. En estos casos, es posible que el propio contrato contemple los mecanismos o causas específicas para su finalización.

Si el contrato no define los modos de terminación, se puede recurrir a lo dispuesto en el Código Civil Colombiano, que en su artículo 1625 menciona los modos de extinción de las obligaciones. Este artículo establece que las obligaciones pueden extinguirse, entre otras formas, por el pago, la novación, la compensación, la condonación de la deuda, la pérdida de la cosa debida, la prescripción o cualquier otro modo previsto por la ley.

Por lo tanto, en ausencia de disposiciones contractuales específicas, serán las normas generales del Código Civil las que determinen cómo y cuándo puede darse por terminado un contrato a término indefinido. Es importante entender que, en caso de incumplimiento, la terminación del contrato puede venir acompañada de la indemnización de los perjuicios causados.

Un contrato válido debe cumplir con ciertos elementos esenciales para ser reconocido legalmente:

• Consentimiento mutuo:debe haber un acuerdo claro y libre de coacción entre las partes.
• Objeto lícito:la finalidad del contrato debe estar en conformidad con la ley y el orden público.
• Capacidad legal de las partes:los firmantes deben ser mayores de edad y estar en pleno uso de sus facultades.
• Formalidades específicas:en algunos casos, es necesario que el contrato cumpla con requisitos como ser redactado por escrito o registrado ante una autoridad competente.

Cuando una de las partes incumple un contrato, lo primero es analizar las cláusulas establecidas para determinar las obligaciones no cumplidas y las penalizaciones aplicables.

Dependiendo del caso, se puede intentar llegar a una solución negociada para resolver el conflicto de manera amistosa. Si esto no es posible, el siguiente paso puede ser recurrir a mecanismos de resolución de conflictos, como mediación o arbitraje, para evitar un proceso judicial.

En última instancia, si no hay acuerdo, se pueden iniciar acciones legales para exigir el cumplimiento del contrato o reclamar daños y perjuicios, según corresponda.

Un contrato de confidencialidad, también conocido como NDA (Non-Disclosure Agreement), es un acuerdo legal que establece el compromiso de las partes de no divulgar información confidencial compartida durante una relación comercial, laboral o estratégica.

Este tipo de contrato se utiliza frecuentemente en negociaciones empresariales, desarrollo de proyectos e investigaciones tecnológicas, o cuando se maneja información sensible que podría perjudicar a una de las partes si se hace pública.

Un contrato de adhesión es un tipo de acuerdo en el que una de las partes, generalmente una empresa, establece de manera unilateral los términos y condiciones del contrato. La otra parte, conocida como adherente, solo tiene la opción de aceptar o rechazar el contrato en su totalidad, sin posibilidad de negociar las cláusulas.

Antes de firmarlo, es importante leer detenidamente sus términos, especialmente aquellos relacionados con penalizaciones, derechos de rescisión y obligaciones adicionales.

Contrato laboral:implica una relación de subordinación con horarios, salario fijo y beneficios laborales.

Contrato de prestación de servicios:es una relación independiente sin subordinación, horarios fijos ni prestaciones.

La elección entre ambos depende de la naturaleza de la relación laboral.

Para registrar una marca, debes seguir estos pasos:

• Realizar una búsqueda de disponibilidad:Asegúrate de que no exista otra marca similar ya registrada.
• Preparar la solicitud:Esto incluye elegir la clase de productos o servicios que cubre tu marca y preparar los documentos necesarios.
• Presentar la solicitud ante la oficina de propiedad intelectual:Esto puede hacerse en línea o de manera presencial en la Superintendencia de Industria y Comercio.
• Examen de la solicitud:La autoridad revisará si tu marca cumple con los requisitos legales.
• Publicación y oposición:Si no hay oposiciones, la marca se publicará en el boletín oficial.
• Recepción del certificado de registro:Si todo es aprobado, se te otorgará el registro y tendrás derechos exclusivos sobre tu marca.

El registro de una marca solo brinda protección en el país donde se realiza, ya que su alcance es territorial.

Si planeas operar en otros países, debes registrarla en cada uno de ellos. Para hacerlo, tienes tres opciones:

• Sistema de Madrid:Un solo trámite para proteger tu marca en múltiples países.
• Registro individual:Solicitar el registro directamente en cada país.

En Colombia, una marca registrada está protegida por 10 años a partir de la fecha de su concesión. Este período es renovable por períodos iguales.

Para renovar el registro de una marca, se debe solicitar dentro de los 6 meses anteriores al vencimiento o en los 6 meses siguientes. Si no se solicita la renovación, la marca se considera caducada.

No es necesario registrar una obra para tener derechos de autor. Los derechos surgen automáticamente en el momento de la creación de la obra, siempre y cuando sea original y esté fijada en un medio tangible (es decir, escrita, grabada, filmada, etc.).

Sin embargo, el registro puede proporcionar beneficios adicionales, como pruebas más claras de la autoría y la fecha de creación, lo que puede ser útil en casos de disputas legales.

La propiedad intelectual en Colombia es el conjunto de derechos que protegen las creaciones de la mente humana. Estos derechos se aplican a obras literarias, artísticas, científicas, invenciones, símbolos, nombres e imágenes.

En Colombia, la propiedad intelectual se organiza en tres áreas:

• Derechos de autor y derechos conexos.
• Variedades vegetales.
• Propiedad industrial.

Los derechos de autor protegen las obras originales de autoría, como libros, música, arte, películas, software y más.

Se otorgan automáticamente desde el momento en que la obra se crea, sin necesidad de un registro formal. Sin embargo, registrar tu obra en una oficina de derechos de autor puede ofrecerte mayor seguridad legal en caso de infracción.

Para proteger tus derechos de autor, asegúrate de mantener un registro de tu obra y su fecha de creación, y considera un registro formal si es necesario.

Registrar un dominio web no otorga protección legal a tu marca. Un dominio solo define tu dirección en internet, pero no impide que otros utilicen tu nombre o símbolo comercial.

Para resguardar tu identidad y evitar el uso indebido de tu marca, es fundamental registrarla formalmente ante la Superintendencia de Industria y Comercio.

Un contrato de cesión de derechos de autor es un acuerdo en el que el autor de una obra transfiere todos o parte de sus derechos exclusivos a otra persona o entidad.

Este contrato es necesario si deseas que otra persona tenga el control total o parcial sobre la explotación de la obra (por ejemplo, para la distribución, reproducción o comercialización).

Es importante formalizar este acuerdo por medio de un contrato para evitar disputas en el futuro.

Si no utilizas tu marca durante un período prolongado, podrías perder el derecho a su protección. Para ello, debe pasar un tiempo de tres (3) años, contados a partir de la fecha de notificación de la resolución, para que se pueda considerar "abandonada", y terceros podrían solicitar su cancelación.

Una patente es un derecho exclusivo que otorga el Estado a un inventor para que pueda explotar su invención por un tiempo determinado.

En Colombia, la patente se tramita ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC).

Para obtener una patente, la invención debe cumplir con los siguientes requisitos:

• Ser nueva.
• Tener potencial creativo.
• Tener aplicación industrial.

Para proteger una invención en Colombia, se puede:

• Investigar si la invención ya está patentada.
• Descargar el formulario de solicitud de patente.
• Presentar la solicitud de patente en línea o de forma física en la SIC.

Un incidente de seguridad es cualquier evento que compromete la confidencialidad, integridad o disponibilidad de la información, como accesos no autorizados, circulación libre de la información, pérdida de datos o ataques informáticos.

Debes reportarlo inmediatamente al área de seguridad de la información de la compañía a través del canal oficial designado para este tipo de casos. No intentes resolverlo por cuenta propia sin acompañamiento de un experto, ya que podrías afectar la investigación o empeorar la situación.

Cuando el responsable del tratamiento de datos personales esté obligado a reportar sus bases de datos, tendrá que hacer el reporte del incidente a través del Registro Nacional de bases de Datos dentro de los quince (15) días hábiles siguientes al momento en que se detecten y sean puestos en conocimiento del área encargada en la compañía.

Los Responsables que no estén obligados a registrar sus bases de datos en el Registro Nacional de Bases de Datos y los encargados del tratamiento, deberán hacer el reporte de los incidentes de seguridad dentro de los quince (15) días hábiles siguientes al momento en que se detecten y sean puestos en conocimiento del área encargada en la compañía a través del aplicativo dispuesto para tal fin en la página web de la Superintendencia de Industria y Comercio, en el micrositio de la Delegatura para la Protección de Datos Personales, en el módulo “Reporte de incidentes de seguridad”.

Las compañías deben aplicar todas las herramientas técnicas, administrativas y humanas para proteger los datos de los titulares, esto puede ser implementando controles técnicos y organizativos en sus sistemas operativos, actualizaciones periódicas, capacitación al personal, monitoreo constante y políticas claras de uso seguro de la información.

Una buena asesoría en datos personales puede salvar a tu compañía, somos expertos en seguridad de la información, ¡contáctanos!